divendres, 27 de novembre del 2009

Sobre els llibres electrònics

Com cada tardor, estic sumit en un pou de desídia, apatia i mandra. Fa temps que vull dedicar un bon post (amb cara i ulls) al llibre electrònic, altrament conegut, en les seves diferents variants dialectals, com a e-book (el llibre) o e-reader (la màquina per a llegir-lo), però no hi ha manera... Em limitaré, doncs, a enllaçar-vos amb un parell de notícies que han aparegut avui sobre el tema: (1) Des del cantó de la pela, és a dir, des d'un vessant més acord amb el sector empresarial, Vilaweb es fa ressò de l'aposta de cada cop més editorials catalanes en favor del llibre electrònic, concretament del creixement de la plataforma digital Edi.cat. (2) Des del cantó de la llibertat, és a dir, des d'un vessant més proper al benefici popular d'aquestes noves tecnologies, tenim l'article Teoría y práctica del libro electrónico publicat per Carlos Martínez al seu blog (tot i que jo l'he trobat a Rebelión). Com bé sabeu (o podeu suposar), i malgrat que el meu sou depèn directament del món del llibre, jo estic clarament posicionat en aquest segon grup. Com a entreteniment, si us avorríssiu, podeu llegir la petita esbatussada que vaig mantenir ara fa un mes amb alguns lectors del blog de l'Antonio Orejudo al diari Público, quan aquest va escriure un article contra la pirateria (de llibres): Esta columna no trata del caso Gurtel.

3 comentaris:

aurora ha dit...

Jajaja. M'ha encantat la teua discussió amb "Una"... el que li dius de Libertad Digital se n'ix :)

Anònim ha dit...

Te confieso que me he despertado hoy dándole vueltas a esa discusión.

1. Todo lo que dices es de un sentido común genial.

2. Me sorprende cómo la gente responde tan mal ante la idea de "hacer algo sin cobrar". La forma de responder de Una cuando le explicas las traducciones que haces, en lugar de felicitarte y apoyarte a que sigas, es la de cerrarse diciendo que no puede hacer lo mismo, y presuponer que tú eres un capitalista hipócrita. Esto es algo muy común; insultar el esfuerzo desinteresado.

3. Por cierto, deberíamos hacer otra aportación dominguera más al deporte-mercantilizado (futbol). Si vamos a ver juntos el barça madrid, Sarah se apunta.

Guille

Joan Vecord ha dit...

(1) A parte del menosprecio al esfuerzo desinteresado, hay también una especie de mecanismo de (auto)defensa de lo propio [¿origen del concepto de propiedad?], junto con el miedo a caer en el abismo del paro y de la pobreza. Todo bien mezclado en la batidora capitalista hace que aquel esfuerzo desinteresado sea visto como competencia desleal, y el voluntariado como un terrorismo que hace crecer el desempleo. Lo básico es mantener el curro, y en virtud a este principio desquiciado es cuando los comerciantes de Castelldefels defienden la prostitución (aunque sea moralmente repudiable) y los de Martorell la fabricación masiva de coches (aunque sea ecológicamente insostenible). Así nos va. Y como siempre, faltaría reforzar una linea intermedia entre el "todo gratis y sin esfuerzo" (cuando es lógico que hay cosas que requieren una materialidad y desgaste físico para producirse) y el "todo requiere un esfuerzo y, por tanto, una compensación" (cuando hay cosas que, gracias a la técnica, hoy en día pueden hacerse simplemente pulsando un par de botones, como por ejemplo la edición de un libro). La filosofía de nuestro tiempo podría resumirse en dos principios: creer estúpidamente que la fruta se recolecta sola y empeñarse estúpidamente en ponerle puertas al campo.

(2) Lo del futbol me está bien. Pero tendríamos que ocupar el bar (¿cuál? ¿Gran Vía? ¿Casanovas?) a partir de las 17h... En cualquier caso, si el plan fallara siempre me quedará el sofá de casa mis padres... ;-)